Ciudad de México. - Mientras México refuerza su relación comercial con Estados Unidos y países asiáticos como China, ha descuidado sus vínculos con Sudamérica, lo que contribuye a una mayor desintegración regional. Sudamérica ha pasado de ser la tercera región más relevante para las importaciones mexicanas al cuarto lugar, superada por Asia. En los primeros cuatro meses del año, las exportaciones de México hacia Sudamérica se contrajeron un 0.37%, afectadas por disminuciones hacia países como Chile, Colombia y Perú, según cifras del Banco de México.
Ramón Padilla, jefe de la Unidad de Desarrollo Económico de la Cepal, comentó que Latinoamérica es una de las regiones menos integradas a nivel global en términos de comercio total entre países. Rafael Nava, presidente de la sección para América Latina y el Caribe del Comce, atribuyó esta situación a la complejidad logística y a la prioridad dada a la región T-MEC y Asia tras la pandemia.
Las exportaciones mexicanas hacia Asia crecieron un 66.4%, impulsadas principalmente por China, donde aumentaron de 5,720.7 millones de dólares en 2012 a 10,057.7 millones el año pasado. En contraste, el comercio con Sudamérica ha sido más favorable para las exportaciones de esa región hacia México.
Martha Bárcena, ex embajadora de México en Estados Unidos, señaló que México necesita una política exterior más creativa para mejorar sus relaciones comerciales con Sudamérica. Aunque el comercio con Europa y Norteamérica ha aumentado significativamente, los conflictos políticos, como los roces diplomáticos con Ecuador, Perú y Argentina, podrían afectar las exportaciones mexicanas a largo plazo.
Ambos especialistas coincidieron en que existe un gran potencial para el crecimiento comercial en la región latinoamericana, y Nava estimó que el comercio de México hacia el sur tiene espacio para aumentar dos o tres veces en el futuro.