Un bombardeo israelí dirigido a un hospital infantil y una escuela en la Franja de Gaza ha resultado en la muerte de al menos 17 personas y dejado 70 heridos, en medio de la creciente escalada de la guerra entre Israel y Hamás. Las presiones políticas y civiles para lograr un alto al fuego han aumentado.
El Ministerio de Sanidad de Gaza informa que el ataque en la escuela Al Fakhoura causó 15 muertos y 70 heridos, mientras que otro ataque en el hospital infantil Al Nasr resultó en 2 muertos y numerosos heridos. La agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) también confirmó que uno de sus colegios fue atacado, utilizado como refugio para familias desplazadas.
Desde que comenzó el conflicto, el número de muertos palestinos ha ido aumentando significativamente día tras día. La ofensiva militar israelí en Gaza ha causado casi 9,500 muertos, la mayoría de ellos niños y mujeres, así como más de 24,000 heridos y 1.5 millones de desplazados.
Un plan de evacuación por parte de Israel también ha fracasado, lo que ha generado más incertidumbre en la región. Israel continúa oponiéndose a un alto al fuego, mientras que las presiones para su implementación crecen a nivel internacional.
Se han llevado a cabo manifestaciones en ciudades como París y Londres, pidiendo el cese de los ataques. Ministros de Exteriores de varios países árabes han instado a un "inmediato cese" de la ofensiva israelí en Gaza, pero Estados Unidos ha defendido el "derecho de Israel a la autodefensa", lo que ha generado desacuerdo y preocupación.